Camino de San Salvador, año 2.006. De Poladura a Campomanes

 


En el mes de marzo del año 2.006 la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de León realizó la tercera etapa del Camino de San Salvador.

Sobre las 9 de la mañana llegamos con el autocar a Poladura de La Tercia y nos preparamos para salir al monte. Había nieve allá arriba y había que ir bien calzados sobre todo.




Comenzamos la subida hacia el Canto la Tusa, por entonces no existía la bonita Cruz de San Salvador, la pondrían unos años después.




Hemos de pasar la Collada de los Eros, en el Pico de Las Palomas, y después la de La Sierra del Cuchillo y el Canto La Tusa que se pasa por el este. Hay que dejarlo a la izquierda de la marcha sin subir a ese monte. Cota 1.567.
No había mucha nieve y los primeros íbamos haciendo huella. Tuvimos suerte con las nubes, que estaban altas y no nevaba cuando pasamos. Después de este paso ya todo es bajada.


Desde El Cuchillo podemos ver abajo el pueblo de Busdongo y los trenes pasar por la estación.


Pero teníamos que buscar la senda, un senderín decimos en León, que baja hacia el Valle de La Madera y Arbas del Puerto. Al fondo ya vemos el monte de La Violina que hay que hay que pasar por detrás para bajar a Asturias, no por la carretera.



Y tras una buena bajada por monte a través llegamos a la Colegiata de Santa María de Arbas. 



Dentro teníamos preparado un refrigerio, que muy bien nos vino, a cubierto en una habitación, pues se cerraron las nubes y se puso a llover. 
Del paso por el Puerto de Pajares y la bajada a San Miguel del Río no tengo fotos, metí la cámara en el fondo de la mochila; y la verdad es que no vimos apenas algo.


Por cosas del tiempo atmosférico en nuestra querida provincia de Oviedo a partir de las 5 de la tarde se levantaron las nubes y salió el sol. Aquí tenemos a dos "pilgrims" tomando el sol en la iglesia de San Antolín de Sotiello. Ya bajando a Campomanes.




Después del frío y la lluvia al pasar el puerto nos vino bien el solaco y estábamos encantados ya caminando por Asturias.


Ya solo nos quedaba pasar por Erias y bajar a Campomanes donde disfrutamos de un soleado rato mientras esperábamos al autocar para regresar a León.
Curiosa excursión en la que el mal tiempo estaba en León pero fue bajar al Concejo de Lena y ¡solazo!
Volveríamos al mes siguiente para continuar descubriendo el precioso Camino de San Salvador de Oviedo.

Baladronadas


Baladronadas


Los nuevos teléfonos vienen ya con una I.A., incorporada que está conectada constantemente a la red con sus semejantes. ¿Sabe usted lo que eso supone? Y no han comenzado a instalar todavía la red 6G.

En tres meses sabrá más de usted el cacharro que su esposa, escuche esto veterano.

Añada a mayores identificación y moneda digital, ¿se lo quiere usted perder?



La I.A., de su móvil llevará sus finanzas y relaciones, y le recordará todos los días la pastilla para... el colesterol, sí, todo eso. ¡Vaya relato de ciencia ficción!, ¿verdad?

Ya me estoy imaginando las reuniones en el club. Nosotros a lo nuestro, las cartas, y ellas, las I.A., a lo suyo. Enseñe bien a la suya... igual le puede ayudar a ganar al Tute o la Barrachina. Sea usted el primero en adquirir un cacharro de esos; seguro que tiene unos ahorrillos...



El turismo en España va a cambiar mucho de aquí a un año vista. Será su móvil el que le dirá donde y cuando podrá pasar unos días de vacaciones. (Incluso a los del Club de los 60)



Yo tendré que comprar cuanto antes, por Armazón, un Detector de Radiación Electromagnética de Campo Múltiple, para que me avise cuando tenga alguno de esos móviles cerca. Y también un Detector de Radiación Atómica como sigan chinchando a los rusquis. ¿Qué opina de esto, vecino?



Sería curioso que las I.A., descubrieran antes que los hombres comunes las geometrías de la 4D y comenzaran a utilizarlas en su propio beneficio. A ver si nos espabilamos un poco, amigos. No es algo tan difícil, busquen vídeos que explican con claridad como es esa geometría. No permitan que esas cosas tan simples les espanten.




Abusos


Abusos


Con las hojas que caen en otoño se nutren los árboles para el año siguiente, y en los animales es algo equivalente; observemos la primavera ya naciente. Vemos estos años el ascenso de Oriente y el declive de Occidente; son cosas transitorias que por lo cortas que son nuestras vidas nos pueden alarmar.



En España residen en estas fechas unos tres millones de emigrantes y a nadie le parece importar. Cuando nos demos cuenta todo será llanto y crujir de dientes. Esta viejuna manera de pensar nos impide ver más allá, a unos años por delante, a la próxima década. La Nueva Europa está por salir de la guardería infantil y la Vieja somos pensionistas de Residencias. Los abuelos han de cuidar de los nietos, o al menos pedirles que vengan a vernos y charlar un rato. Necesitamos verlos.



Así como tenemos la nariz en medio de la cara y no la vemos tampoco somos capaces de ver, de imaginar incluso, ni la mitad de las cosas de lo que podemos ser capaces.

Un ejemplo recurrente: pensar que La Luna, ese satélite que tenemos por “natural” es mas bien como un huevo al que le hubieran sacado la yema y puesto maquinaria exótica en su interior se nos antoja muy difícil.



¿Pero no la hizo Dios?

Ya, eso pone en un libro. Va a ser que no tenía nada mejor que hacer aquel día...; ya te digo, vecino.

Repito: el cuerpo humano tiene en sí mismo resumido el universo y su... ¿evolución?

Así abusamos de nuestro organismo así del mundo por el que andamos. ¿Quienes nos enseñaron a hacer tales cosas? Si no lo sabe haga un pequeño curso de Historia Mundial; todo eso de los reinos e imperios por aquí y por allá. Tan solo Oceanía se libró hasta el siglo XVIII.



Bueno, vale, igual, a fin de cuentas no somos mas que esas hojas que vemos caer de los árboles cada otoño. ¿Usted qué opina?


Aprovechemos el tiempo para aprender de una conciencia alienígena

Aprovechemos el tiempo para aprender de una conciencia alienígena Seguimos a vueltas con el extraño “cometa” que en estos días está entran...