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Perfidia y despecho


Perfidia y despecho


Hola de nuevo, mis increíbles amigos, ya estamos en septiembre y algo se nota.

No confíes en los griegos, ni aunque traigan regalos”, me parece estar escuchando a Ulises.

Lo que están haciendo con los africanos en los últimos años me parece un crimen de lesa humanidad. Venga a traer millones de moritos y conguitos, engañados por los esclavistas.

¡Negreros!

¿Qué intentan conseguir? Arrojemos algo de luz sobre este asunto.

Tal vez que los europeos volvamos a buscar una solución final. En este siglo con africanos.

¿A quién beneficia?

Desde luego no a los europeos, continentales.



¿Me juzga por mi tamaño? ¿por el color de la piel o el de los ojos? No debería, tengo un poderoso Aliado.

Míreme con los ojos del Corazón, y evite los juicios de valor. Tan solo intento evitar un mal mayor, el de la maldad con que arrastraron a la Alemania del siglo pasado a la destrucción total; es la misma pérfida jugarreta, de los mismos bichos bichejos.



No piense usted en tiempo lineal, de calendario, sino en sucesos y verá que nos están preparando la misma matanza. Industrial.

Cambia, aparentemente, que en este siglo Rusia es cristiana y ¿Alemania y los demás? ¿Qué somos ahora? Prefiero no mirar hacia nuestro Gobierno de Progreso.

¡Todos con La Roja!

Prefiero reírme que no llorar. ¿Recuerdan las fumarolas que salían de los crematorios en el año 2020.¿Sí? ¿No pillan la idea?

Descarten el tiempo, tan solo observen el suceso.

Oscuras volutas elevaban al Cielo nuestras sinceras oraciones”.

¿No aprendimos nada?



Se lo vuelvo a repetir: y por lo demás y en mi opinión Cartago...; digo: o dinero o democracia.

Lo primero ya vemos lo que nos está consiguiendo ahora mismo. Gente con cuchillo matando al primero que pillan por delante. Demencia.

Dinero, la especia que extraen de este mundo, cada año más desértico, las Grandes Casas Comerciales.



Aprendan a beber agua solarizada, les vendrá muy bien.

Me gustaría volver algún día a la gran Duna de Corrubedo, pasar sus arenas y darme un baño en su larga playa del fin del mundo.

Hoy me veis, pero en otro giro del tiempo me habré ido con mis Luciérnagas del Señor.

No puedo decir más.



El Mal y la maldad


El Mal y la maldad


Hola amigos, aquí seguimos... como el rayo que no cesa

Hablando con propiedad y para hispanohablantes, americanos inclusive, les puedo decir, asegurar más bien, que... ¡la cebada no es trigo! ¡Sí! ¡Que no les engañen!

Es una broma...



Yo todos los días he de procurar contener la desazón que me producen las noticias en las teles y periódicos. Al perro viejo le toca aprender mañas nuevas.

Para nosotros, los seres humanos, el Tiempo es algo relativo al funcionamiento de nuestro cerebro, si perdemos la consciencia, la atención cerebral, perdemos la noción del tiempo.

No sabemos si ha pasado un minuto, una hora o un día.



También seguimos sin tener noción clara y cierta de lo que es El Mal, fastidioso elemento, que consigue producir en nosotros maldad, si lo acumulamos inadvertidamente. Hay que lavarse, amigos.



Este tipo de Química exótica nos sigue pareciendo Alquimia, y no sabemos que es posible limpiarlo de uno mismo y de los demás. Como la ceniza de la chimenea o la grasa de la campana extractora.

Bueno, esto es una cosa ignorada que también se llegará a conocer. Les estoy poniendo en antecedentes.

Hay seres a los cuales les encanta ese elemento químico, se lo tragan sin más, oscurillos ellos. Y después de bien alimentados hacen todo el daño que pueden a los demás.



Aún somos seres muy irracionales y los ejemplos históricos de líderes que tenemos para seguir y mejorar suelen ser criminales, genocidas incluso, por causa del Mal que acumularon.

Excluyo a Gautama, Jesús y cuatro mas... ¿Gandi?


Las imágenes han sido generadas, a partir de mis ideas, con Designer de Microsoft.


Intangible

Intangible Cambios en el planeta natural. Amores luminosos, cariñitos pasajeros, que pasan por este mundo viajeros, peregrinos de Lo Inta...