Dignidad


Dignidad


Hola amigos, ¿alguno ha cantado línea? Pues entonces continuamos.

Hay dignidades que deben respetarse e indignidades que rechazar. Esto es algo básico pues cuando se pierde el respeto a la vida, incluso a la vida humana, se regresa fácilmente a la barbarie.

Yo siempre les trato de usted, y eso es por algo, algo muy básico. Tan solo mi esposa y algún allegado, ya jubilado, me pueden tratar de tú sin pedirme permiso.



Confío en que comprendan mi postura, yo no puedo ser juez y parte de las conciencias humanas y sus comportamientos; no soporto las faltas de respeto.

En el Inframundo siempre hay y habrá sitio donde incorporar a tanto mongolo como anda por las calles, y no digo nada por las... redes sociales.



Yo, como mucho, me limito a darles remedios para la... halitosis. Remedios caseros: ajo, cayena, caramelos de miel y limón, y el mejor de todos: yogur de leche de vaca, de pasto, de las que andan por el prado comiendo hierba. También le puede ayudar el echar un poco de bicarbonato en su cepillo de dientes, y después frote bien. Sí.

Remedios vendo que para mí no tengo.



Mientras andes pisando piedras y bebiendo de las fuentes del campo eres hijo de tu siglo y su violencia, como escribió Bernabé hace mucho tiempo. Es tontería quejarse.

Efectivamente, como dicen desde hace aun más tiempo los chinos, unas veces toca ser Yin y otras Yang. O como diría un forjador de los de ahora: no se calientan todos los hierros en el fuego al mismo tiempo.



Y después hay que sacudirlos por un lado y el otro, efectivamente.

Y aguantar el “tratamiento” con dignidad.


Hacer libaciones


Hacer libaciones


Hola amigos, confío en que remontemos el vuelo de aquí a unos días.



Vale ya de penurias, a este paso ni los leones tendrán algo que masticar el año próximo. Todavía quedan muchos de entre nosotros que son auténticos “cabeza de huevo” (Calimeros) que creen que pueden arreglar esta humanidad a base de lloriqueos y rogativas.



Hemos de estar más vitalmente receptivos, y mejorar nuestra atención. Estar a la que salta, que … falar y escardar, como dicen en Asturias, todo es empezar, y otros se llevan las pelas y la lana.

Llevamos un año de fiestas y turismo desatados. Los pensionistas somos los mas viajeros y los trenes van llenos todos los fines de semana.

Escuché decir a un turista, sería un bulo, que un millonario americano había comprado un Circo Romano para convertirlo en un estadio yanqui, ¡sí! Pero que le debió fallar la financiación de... ¿Los Emiratos? Y se lo quiere devolver a la ciudad para que preparen algo allí, y que los leones tengan algo pa´ … Igual donde Don Paco …



Yo es que me salgo de esta carnicería siempre que puedo; cuando se opera en lo Oscuro hacer ofrendas y libaciones a la Claridad son muy aconsejables.

Extraer de la tierra dura algo suave y ofrecerle al Altísimo es cosa que ya hizo Abel antes que ningún otro. Su hermano Caín no entendió de qué iba el asunto, ni sus sucesores, y hubo que esperar hasta Noé para volver a las libaciones; cuando paró de llover, eso sí.

¡Que no es necesario matar nada ni a nadie, chachis!

Mira que somos duros de entendederas. Las libaciones podemos ofrecerlas al prepotente Cronion, que no se ofenderá. Chiquillos. En el vino la verdad, y en el agua la curación de nuestra Ilión.

No hago mas que darles consejos saludables para animar sus conciencias, no puedo ser mas benigno.



¿No veis que andáis con caballos tardos y os llevan mulas viejas? Tan solo os esperan una lápida y una esquela.

Despertar ya de una vez, permitir que algo nuevo penetre en vuestro duro cráneo, amigos.


Bicherío


Bicherío


Hola amigos, salud y que todo sea para bien de la humanidad.

Sigo leyendo y escuchando feroces críticas hacia los españoles que realizaron la Conquista de América, (E incluso de la Reconquista Española; los bichos se reproducen muy bien)

¡Vaya velo tienen en los ojos los que tal cosa defienden! Que sí, majos, que sí.



Que si los españoles les quitaron de comerse a los vecinos... Que si les prohibieron la adoración a los bichos y les unieron a todos en una sola nación: El Virreinato de la Nueva España.

Como ya no podían comer carne humana, por imposición española, ¡qué malos, verdad! Les fueron llevando al territorio gallinas y cerdos, ovejas y vacas, burros y caballos, ¿habrase visto mayor maldad?



¡Más guacamole para el taco!

Les llevaron el vino y ¡la cerveza! ¿Mayor malicia...?

Pues sí, les enseñaron a comer marisco y pescado, de primero Ostión y después una tabla de pulpo y una de merluza frita, ¿pero a qué pinche pendejo se le ocurrió enseñarles tales cosas? No, si luego querrán comer langosta, ya te digo.

¡Ándele!



Pues aún la hicieron más gorda: les llevaron toros bravos para que hicieran con ellos encierros y corridas, en vez de con las tribus vecinas. Sí.

Perfidia, seguro que a aquellos españoles les guiaba la mas pura perfidia.

Y venga a construir catedrales y hospitales, universidades o al menos colegios donde aprender las cuatro letras y a hacer cuentas. Insania, seguro que era eso lo que tenían los españoles en la cabeza.

A mayores persiguieron la brujería y todo rastro que los bichos tenían o habían dejado en el continente. Sí.



A cambio les enseñaron a hacer un aguardiente que allí llaman Tequila, y unas armas terribles llamadas: guitarras. Algo infame, ¿no es cierto?

¡Ay, Lupita!



Cuando os quitéis el velo de los ojos veréis esto más claro, manitos. Menuda sementera de territorio tenéis allí. Os quiero mucho, a ver si os dais cuenta.


Conspiraciones como melones

Conspiraciones como melones Me estoy riendo y bastante a cuenta del dislate de querer hacer pasar por cometa a una inmensa nave espacial, ...