Conciencias diversas por todas partes
Como apenas conocemos las diversas conciencias que habitan La Tierra nos resulta difícil asimilar como podrían ser las conciencias de otros planetas del sistema solar y no digamos ya las extra-solares.
Para mucha gente el que un día llegaran a ver un tipo o tipa, tipeja, de aspecto noruego y un físico estupendo es sinónimo de "hermano mayor" o "guía galáctico", algo así; en cambio un bajito cabezón, con una piel gris perla les haría saltar y salir corriendo como liebres, o hacerse caquita en los pantalones.
Es un problema de conciencia.
De la nuestra, que somos todavía muy ignorantes.
Los primeros tipos aludidos puede que sean, casi seguro, unos nazis de tomo y lomo, deseando exterminarnos como si fuéramos palestinos, y en cambio al chaparro casi se le podría considerar un ángel.
¿De qué depende, entonces? Por si usted se topa algún día con foráneos.
De su conciencia, de sus creencias, de su cuento, relato, existencial, de su buena o mala fe; de la de ellos y de la suya propia.
Nuestros ancestros tenían conocimiento y relación con los seres, nada elementales, de los ríos y los montes, de los animales, del Sol y La Luna y de los planetas, que no son errantes. No era adoración lo que hacían, eran muestras de respeto, de consideración, el procurar mantener una buena relación con ellos. Y que nos beneficiaran de algún modo, que nunca nos faltara de comer.
Cuando llegaron a la península ibérica los dioses asiáticos, con sus cultos personalistas, arrasaron con todo. Los primeros fueron los fenicios, continuaron de algún modo los romanos con sus Mitra y demás, y el desastre final llegó con la caída de su colosal imperio y dominación. Obligaban a adorar, sí: a adorar a unos emperadores que...
Pasados los siglos quedó la persecución de La Magia, las cazas de brujas, y tras la Ilustración el Materialismo consecuente que ha conseguido anular en la práctica todo conocimiento sobre la conciencia. Sucedió esto mismo a los dos lados del Telón de Acero en el siglo XX y seguimos pagando las consecuencias.
Ateos sin escrúpulos ni vergüenza te tildan enseguida de... pirado, si les hablas de este tema.
La conciencia es una cosa que... Nunca miran que la suya propia es pequeña, oscura, sucia, y la tienen escondida en su pequeño túnel, allá donde nunca penetra la luz del sol, ¡o no debería!
No se merecen ni que les metan un buen... puerro. ¿Me siguen?
¿Conciencias estelares? ¿Ustedes pueden concebir que haya gente creando estrellas y que dejan a sus niños que hagan... planetas? No les cabe en la cabeza, seguro, y disculpen lo de los puerros, que por ahí tampoco...
¿Son conciencias las llamas de los fuegos? Como viven en ciudades seguramente nunca se han pasado mirando un buen rato a la lumbre de un fogón o en un fuego de campamento, nunca han fijado su atención en su baile y en su geometría casi euclidiana. Como yo soy un tipo No Euclidiano sí me he fijado.
Se ha quemado la intemerata en estos días en la península ibérica pero por nuestra baja conciencia, oscura, y escondida tan solo hemos visto... ¡llamaradas! Y unas nubes de humo tóxico por todas partes.
¿Quieren ustedes espabilar ya de una santísima vez?
¿Cuántas conciencias, grandes y pequeñas, pueden existir en esta galaxia? ¿Y en el concierto universal? Solo Dios lo sabe, así que usted pregunte, pregunte... Su Conciencia está extendida por todas partes. El Reino de Dios está dentro de ti y a tu alrededor, no en edificios de madera y piedra. Corta un trozo de madera y allí estaré, levanta una piedra y me encontrarás....
¿Qué más hay que añadir, almas cándidas? Ya os llegará La Claridad, en unos pocos años.
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