Neuromante, de William Gibson

 


Neuromante, de William Gibson


Novela publicada en el año 1984. Recuerde ese año.

Un nuevo estilo de escritura ha llegado a la ciencia ficción: el cyberpunk, ya nada será igual de aquí en adelante.

Los blues de Chiba City.

Una taberna medio japonesa medio irlandesa donde se reúnen los de la mirada torva y sus chicas vestidas de ciclista, de un equipo olímpico o algo así. Están de charlita en la barra y de repente:

¡A pasado un ángel!

Bellezón.

Los nipones ya casi han olvidado como hacer clones humanos pero los chinorris están reeditando el tema. El prota: Case, a sus 24 añitos ya es un mangante titulado, un experto en circular durante horas robando a todo el que pille enganchado a esa alucinación de consenso que llaman: Matrix.

Y se le ocurre robar a sus jefes; le desenchufarán de la Matrix como castigo.

Se irá a Japón, a buscar una cura, a los bajos fondos del barrio Ninsei. Es un gaijin más buscándose la vida por las calles del puerto.

Un operador de no se sabe qué Casa Comercial le ofrece ser reconstruido a su estado anterior si... admite trabajar para él. Será su ninja personal, como es yanqui acepta y los Comerciales le llevarán de vuelta a los USA. Pero... le han inyectado un veneno y si no cumple con su misión no le darán el antídoto.

Mediante una conexión extracorporal se volverá a conectar con el Cyberspace. Vuelve a ser un yonki de la Matrix.

Para los pecadores, reincidentes, no hay perdón.

El tipo se pasa días enteros enganchado a la red de redes. El y otros muchos drogadictos similares, consumidores habituales de anfetas, irán creando lo que hoy día conocemos como: Metaverso.

Matrix para idiotas, algo diseñado para el mejor servicio a las agencias de seguridad nacional, americanas.

El caos es nuestro negocio y nuestro modo de operar.

Aparecen en escena las I.A. Todas ellas consignadas en el Registro Turing. (Supuestamente)

Los protagonistas suben a Sión y tendrán que acostumbrarse a la gravedad cero. La calle principal se llama Rue Jules Verne. Tras conectar con Los Fundadores están esperando a que lleguen Los últimos días y la Caída de Babilonia.

Fuman mucho, eso sí, petas como Cohibas. Sí.

Regresan a La Tierra para enfrentarse a las I.A. A Case le costará comprender que está bajo el dominio total y absoluto de una de ellas. Incluso puede verla con aspecto de una atractiva mujer, o de un finlandés.

Para luchar contra eso contará con la ayuda de un amigo: Dixie, que es un engendro basado en memorias ROM donde se guarda memoria de un famoso haker, ya finado. No es capaz de escribir poemas pero le echará un cable cuando le sea posible. Total, el cielo es holográfico y Los Turing le persiguen como lobos.

Todo está dirigido desde la City de Londres...

¿Qué ocurrirá?



Cuando en el año 1999 estrenaron la peli, infame, Matrix me enfadé bastante. Hacía un par de años que había leído esta novela y la versión cinematográfica me pareció infumable. Se salva un poco por unos actores extraordinarios, pero poco.



El Transhumanismo, esa boñiga como el sombrero de un segador, es una broma macabra, grotesca, al lado de lo que escribió William Gibson en 1983 y publicó en el emblemático año siguiente.


Irritación causal


Irritación causal


Hola amigos, feliz domingo os deseo a todos.

¿A cuánta gente veo a diario que parece que llevara un letrero luminoso en la frente?

Mensajes estereotipados que brillan en la oscuridad, mental.



Tan solo se me ocurre pedirle a las camareras del barrio que me pongan aquella fría canción:

¡Mi novio es un zombi! Es un muerto viviente...

¿La recuerdan?

Me identifico con las chicas viendo lo que tienen que aguantar día tras día. sí.



En toda operación mecánica, científica, siempre hay que medir ¡dos veces! Y después quedarnos con una de las medidas; la que nos parezca mas adecuada. ¿Ven por dónde voy?

Vivimos unos tiempos similares a los de Calígula, y no es sensato asomar la cabeza. Después vendrá Nerón. Entremedias estuvo Claudio; no sé, igual no se repite exactamente; este era un tipo que hablaba rarillo, era de pelo claro, usaba peluca, y cuando le daba el sol se le ponía la piel de color zanahoria. Mesalina cuidó muy bien de él.



En fin, estos son otros tiempos, ¿verdad?

Y no va arder Roma por un quítame allá esas pajas. Ya no quedan apenas cristianos, auténticos, a los que echarles la culpa del derrumbamiento previsto. ¿Qué harán entonces los delincuentes?

Seguimos en el circo, y yo estoy del lado de... los leones.



¿Me notan irritado?

Tal vez sea por que las risas de los turistas me raspan los nervios como cuchillos serrados. Y si son las de las mujeres es como cuando rayaban la pizarra de clase con algo metálico. ¡Dentera! ¿Conoce esa sensación?, ¿a qué puede ser debida?

¿Qué ocurre con la gente hoy día? Parecen... metalizados.

¿Usted qué prefiere: dinero o democracia? En mi barrio prefieren el dinero y por ello de nada vale la voluntad de los vecinos y las reclamaciones de la Asociación. Ahora es una húmeda cochinera.



Sócrates mencionaba a menudo a su Daimon, un ser “transparente y seco” que los romanos tradujeron por Genius. Los musulmanes conservaron esa denominación: Genio, pero los cristianos romanos prefirieron la de Demonio. Perdidos en la traducción permanecemos hasta el día de hoy.

Yo prefiero la denominación Ánima o Alma que usaban mis abuelas.

¿Y porqué esa disparidad de criterios? ¿Y porqué se sigue manteniendo?

Lo que para Sócrates era lo bueno y sano para los creyentes actuales, moros o cristianos, es lo malo. ¿Y eso porqué?

¿Usted lo sabe?




Alegre buscador


Alegre buscador


Hola corazones, ¿qué tal va todo?

El Alegre buscador sigue rascando la piel de este asunto. Que después del Alba viene la Aurora.

Cada persona es un mundo y cada cual tiene un desarrollo personal, que no es igual el planeta Marte que el Júpiter. Esto es fácil de comprender.

Yo, ahora, sé más cosas de orientación que cuando comencé con la OJE (Hace unos 50 años)

Pero yo me noto el mismo cadete, barrigón eso sí, queriendo aprender cómo funcionan las cosas, se mueven; aquí en la tierra o allá en el cielo.



¡Me caguen todos los demonios coronados!

No sé cómo lo expresaba Sócrates, pues no me vienen de nuevo con que ¡la tierra es plana!

Y mi trasero oblongo, ya te digo. A estos corderos les suelto una noche sin luna en la montaña leonesa y se los comen los lobos.

Pensando de ese modo si un día vieran el plano superficial del Océano Cósmico de inmediato se irían al fondo, con las criaturas abisales.

¿Han visto la película Alien, el octavo pasajero, y sus secuelas? Esos bichos son así. Soy un fan de Sigourney Weaver.



Pero bueno, dejemos ya los camarones y otras especies que solo sirven para el orden alimenticio. Llegados a este punto, ¿usted cómo se siente? ¿Más del lado de los leones o del de los cristianos? Que conste y tengo a mi esposa por testigo que cada vez como menos carne. Pero no solo de pan vive el hombre ¿Y usted?



Verán... Me imprecaron en una calle del barrio dos ¿señoritas? Por estar fumando.

¿Y eso? Que les ofende el humo, fue su excusa.

Observo: llevan en un carrito a un perrito, sí. Deben de ser de las que no quieren tener bebés, y prefieren la compañía de un lambe...

¡Váyanse al carajo! Y no bajen...

Suerte tuvieron que me pillaron de buen humor y el cabello recién cortado, que si me pillan rugiente y melenudo...



Tenía que haberles tomado la Dirección MAC, su matrícula Matrix, y putearlas un poco con algunos comandos Bluetooth. Pero estaba de buen amor, ¿es que, de verdad, no se enteran de nada?

El perrito tenía cara de felicidad, eso sí, con la lengua fuera.

Los perritos son mis hermanitos, nos contamos cosas de mucha risa. Sí.

Mi madre me crió junto a un perdiguero de Burgos, Chester le llamaba. Tenía un biberón para él y otro para mí. Igual nos los cambiamos en alguna ocasión. (Guiño)



Hoy día casi nadie mira al cielo, ni de día ni de noche, Y eso es por algo. Es raro ver el arco iris, la Señal de Noé, del pacto entre el ser humano, tan multiplicado, y el ser único, El Altísimo.

Que la Paz esté con ustedes.


Otra mirada al Camino de Santiago

Una mirada nostálgica al Camino de Santiago mediante un fotomontaje musical, lo hacemos caminando; en verano por millares en invierno cuatro...