Identificación Digital control total


Identificación Digital, control total


Hola amigos. ¿Qué tal va todo? Confío que bien.

¿Qué podría decirles que ustedes no sepan? Ya sabrán lo que es una CBDC, seguro.

Cuando comienza una guerra la verdad se va por el sumidero, y tenemos algunas en marcha y otras en preparación. El mismo relato de miles de años atrás, invariable. La vieja Matriz 3D.

Honestidad, hay que ser honestos y reconocerlo; mientras sigamos con este clima bélico estaremos cerrados a las verdades superiores. Ajo y agua, amigos.



No espero una gran guerra mundial, con muchas bombas atómicas y electromagnéticas, y muchos millones de muertos, atomizados; pero sí es posible que aparezca otro “bichito volador” para obligarnos a todos a la Identificación Digital y sus consecuencias. Las CBDC.

No tendrás nada y serás... ¡feliz!



Yo no puedo “estar partiendo piedras”, como dicen en Portugal, un año tras otro.

Ya hice mi labor en la Renfe y publiqué todos los libros que fui capaz. Si publico otro será para regalar a los amigos. Ya les avisaré.

En cierto modo somos tanto hijos de las estrellas del cielo como de la maravillosa Tierra, pero en las últimas centurias hemos ido perdiendo el equilibrio machacando cada vez más La Naturaleza. Minas y mas minas por todas partes. Siguiendo a una Ciencia sin Conciencia.



Ya no queda gente que sea harina de otro costal, que viva en comunión con la naturaleza, aquí en España. Y si quedan serán cuatro gatos. La mayoría somos gente de ciudad o de villas más o menos grandes faenando en trabajos donde lo fácil es “apretarnos los tornillos”; todos tememos que no se nos vaya a soltar alguna tuerca, y perderla.

Yo he pasado por ello y les comprendo.


Camino de Santiago 2002. De Molinaseca a Villafranca del Bierzo y final.

 


Continuando con mis fotos de recuerdos del Camino de Santiago 2002.

Salimos bien temprano de Molinaseca y nos vamos presurosos a desayunar a Ponferrada. Como es grande la ciudad nos dispersamos los unos por aquí y los otros por allá. El caso es que llegando a Cacabelos más o menos nos habíamos juntado en varios grupos. Al entrar en la villa, es el 16 de agosto, nos encontramos también con una procesión.

El caso es que el grupo de los vascos y valencianos decidieron quedarse en el Albergue Municipal, en el Santuario de la Quinta Angustia. Y pasar la tarde en la playa fluvial del río Cúa.


Un grupo, sobre todo de catalanes y madrileños, me siguió hasta Villafranca del Bierzo. Yo me quedé en el albergue municipal pero la mayoría fueron al Refugio de Jato, el Ave Fénix.

https://www.albergueavefenix.es/


Después de ducharnos y esas cosas preparamos un fiestón de los buenos, con la participación del buenazo de  Jesús Jato. Se le da bien hacer café y dar conversación...


Me llevé a unos cuantos a conocer un poco Villafranca del Bierzo y cenar en sitios que conozco de toda confianza. Y después me despedí de ellos pues de madrugada tenía que subir al coche de línea para volver a casa. El lunes a trabajar.


Pero tal y como les prometí días mas tarde, gracias al tren, estaba en Compostela para acompañarles en su entrada a la catedral de Santiago.


Tras la misa del peregrino salir a la plaza del Obrador para hacernos las fotos de recuerdo. Y vuelta por aquí, y vuelta por allá. A buscar dónde alojarse todo el grupo.


Quedamos para mas tarde y me los llevé a cenar a un restaurante popular, de precio asequible, que había por entonces. Quién diría que la mitad eran del Barsa y la otra del Real Madrid..


Y después a festejar la noche compostelana, que solo se vive una vez.


A la mañana siguiente llegó el grupo de valencianos y vascos.


¿Y dónde vamos a cenar? ¿Eh, Dani, dónde vamos a cenar?
Menos mal que iba con ellos un catalán, Xevi, y me hicieron caso... ¡al mismo restauran!


Y fin, por el momento de ese Camino de Santiago. Aún me quedaban unos días de vacaciones y regresaría para completarlo; pero ya sería en el mes de diciembre, y con un tiempo muy diferente.
Ya subiré las fotos un día de estos, disfrutar amigos.


Titán, novela de John Varley

 


Titán, novela de John Varley

Novela publicada en el año 1979, y que obtuvo el Premio Locus del año 1980.

Por aquel entonces tan solo se conocían doce lunas de Saturno y al autor le pareció que lo más interesante sería idear un viaje a Titán. A mí, personalmente, me llama más la atención Encelado.

Una nave de la NASA se dirige hacia allá y mientras llegan y no los tripulantes se entretienen cambiando de pareja, y muy a menudo.

¿Qué hay en Saturno aparte de unos cuantos pedruscos dando vueltas alrededor?

Localizan una extraña luna, Temis, pero al acercarse son capturados por los tentáculos de una extraña ¿medusa espacial?

La capitana Siroco despierta en manos de unos seres a los que no puede ver. Se siente como Jonás dentro de la ballena.

Tiempo adelante dos chicas: Siroco y Gaby se encuentran, vaya por Dios, se querrán, mucho, mucho, pero mucho...

Jugarán a ser Caín y Abel, matarán animales para comer y buscarán frutos del bosque, en ese plan.

Por fin aparece un hombre, de la tripulación, para acompañar a las exploradoras, Calvin. Evito el apellido pues también anda en cueros.

En el cielo aparece un día un dirigible al que llamarán Apeadero.

A partir de ese punto, y como no hay roce en el trío, el autor se enreda con la mitología nórdica y griega. Y nos hace ver que ese mundo en el que se encuentran es pura creación... extraterrestre.



El autor John Varley va sacando conejos de la chistera y llevando a los personajes a situaciones de lo más variopinto. ¡¡Embarazadas!!

¿Pero como...? sino...

Vendrán una aventura tras otra en un mundo de pesadilla.

Un refrito de ideas tomadas de clásicos de Fantasía y Ciencia Ficción que tuvo mucho éxito en su tiempo.

Para mí se alarga demasiado con fruslerías y el resultado final es algo decepcionante.

Cosas de volver a leer libros con muchos años a cuestas.


Aprovechemos el tiempo para aprender de una conciencia alienígena

Aprovechemos el tiempo para aprender de una conciencia alienígena Seguimos a vueltas con el extraño “cometa” que en estos días está entran...