La mar de contentos
A la mayoría de las personas les gusta vivir como en cardúmenes, sí, como los arenques, en lo que llamamos ciudades, con millones y millones de vecinos que no se conocen de nada, y no tienen algo en común más allá de ser hinchas de algún equipo deportivo.
Se sienten así más seguras, a refugio, ocultas, como los animales en manada.
Pero les van a implantar la Identificación Digital, Biométrica, para andar por esas ciudades, por las calles más céntricas, que serán ¡inteligentes! Y estarán llenas de cámaras ocultas y sistemas de “esnifado de datos”.
Los arenques son así; se moverán de aquí para allá como felicísimos consumidores controlados por máquinas inteligentes.
Bienvenidos, refugiados.
¡Pues claro que sí!
España está ahora mismo más vaciada que cuando vinieron los Vándalos y los Alanos.
Sitio es lo que sobra, por todas partes, ¿verdad?
En España hoy día se sigue eligiendo al más inútil para el más alto cargo.
Es algo que yo conocí cuando iba al instituto, cada curso se elegía como delegado de clase al más golfo o al más cateto, al que se piraba todas las clases que podía. Con la democracia este sistema de elección pasó a los cargos públicos, y es el que actualmente funciona.
Tenemos lo que nos merecemos, bien ganado a pulso.
Siempre se elige para un cargo público a un tipo al que no le comprarías ni un sillín usado de bicicleta en el rastro.
Seguir así, mongolos, que vamos muy bien; la mar de contentos, ¿verdad?
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