Unas fotos de recuerdo de una excursión, la semana pasada, por la Comarca de Omaña, en la provincia de León.
Tras parar a tomar café en Riello comenzamos por subir a Castro de La Lomba para disfrutar de las vistas un luminoso día. Al fondo las montañas de Luna.
Hacia el norte vemos las montañas de Omaña, la Sierra de Villabandín concretamente.
Nos dimos una vuelta por la iglesia del pueblo, que conserva las campanas y un curioso añadido al que llaman La Gusera.
La siguiente parada la hicimos en Campo La Lomba, y su curiosa ¿pajarera? al lado del templo.
Un perro Carea nos vino a ver y nos llevó con sus compañeros, unos preciosos cachorros de Mastín Leonés. En la foto uno de ellos. A la salida del pueblo encontramos a su padre y madre cuidando unos jatos.
Pasamos Folloso y bajamos hasta El Castillo a tomar un refresco y mojarnos un poco en el río.
El castillo, ahora arruinado, fue construido en origen por un conde bizantino llegado a la corte de Alfonso III, en Oviedo. Además de este, en Omaña, levantó otro en Boñar.
A la muerte de su único hijo, cuentan las crónicas, pasó a la propiedad real. Con los siglos sería patrimonio de los Condes de Luna y sus descendientes la familia Quiñones.
Marchamos después hasta Fasgar, donde coincidimos con un grupo de senderistas que estaban recorriendo un tramo del Viejo Camino de Santiago por la montaña.
No subieron al Campo de Santiago aludiendo al calor imperante. Y yo a que iba en chanclas, que si no...
Para comer algo sustancioso decidimos marchar hasta Senra, que tiene un buen restaurante. Cumbres de Omaña.
Tras el yogur continuamos hacia Murias de Paredes, a tomar un poco el fresco. Eso sí: sentados a la sombra.
Y poco más os puedo contar, paramos de nuevo en Riello a tomar café y de vuelta a la capital.
Estaba muy bonita toda esta zona de la Comarca de Omaña, pero, hacia un calor...
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