Mentalidad decayente

Mentalidad decayente

Hola amigos, despedimos el año dándole a la tecla y la zambomba, ¿porqué no?

Como puede comprobar con el teléfono que tiene, o tendrá en las manos, se ha mejorado bastante en tecnología en los últimos años pero casi nada en mentalidad, incluso yo diría que hemos ido para atrás.

Si los perros hablaran les echarían unos buenos sermones a sus dueños casi cada día: ¡escuche sus ladridos!

Parece como si siempre tuviéramos que estar preocupados; por algo, por nada..., cuando nuestro estado natural es estar ociosos, jocosos, despreocupados.

¿Qué sistema se está utilizando para tenernos fastidiados y hastiados?

Pues... los rumores, los bulos, las maledicencias; es algo tan antiguo como comer con los dedos.

Hoy día simplemente se ha amplificado utilizando las redes sociales. Solo producen ruido.

No prestamos atención al Silencio; ya con conseguir calmar la mente, que deje de actuar, y el cerebro, que deje de hablar, nos parece haber conseguido algo; pero aún estamos "al otro lado de la puerta".

No hemos entrado al Silencio y su misterio. Enseguida algo se nos pasa por la cabeza y ¡vuelta a empezar!

¿Se puede hacer cosas sin pensar?

Y aún así que resulten ser unas acciones correctas, que no traigan consigo reproches, habladurías.

Sucedió..., así pasó...

Dejarse de palabrería. Unas cosas salen y otras no, y al conjunto lo llamamos La Realidad.

Que es una matriz de creencias y paradigmas, darse cuenta de ello y dejar fuera el miedo y la apatía.

Tal vez esa juventud que ni lee ni sabe apenas escribir, tan solo hacer garabatos con esprais en las fachadas o los trenes, lleguen a ver cambios interesantes en esta matriz. Sus casi vacíos cerebros tal vez puedan aceptar ideas novedosas, sin tanta superchería; se las tomarán como galletitas.

¿Quién sabe?

Vienen cambios interesantes y no los provocaran las... cabezas pensantes, los ideólogos, los programadores, los controladores. Los que llenan líneas y líneas de palabras en diferentes idiomas.

Mas de uno se va a caer de la silla. Al tiempo. (Se les llama terremotos)

Feliz Solisticio